miércoles, 25 de enero de 2012

Nana

No te preocupes, niño,
las musas no te han abandonado.

Duermen en la noche
junto a la cabecera de tu cama
y rezan por ti a todos los dioses
que pueden recordar.

Sus ojos están en blanco
y las horas pasan,
y ellas no dejan de rezar y rezar.

No te preocupes, niño,
ellas te acompañan
en todo lo que haces:

en todas y cada una de las cosas.
En todos tus gestos.

No te preocupes, niño,
ellas saben que estás asustado
y solo,

ellas conocen
cada uno de tus pensamientos.

continúa, anda y no pares.

No te pares nunca,
sólo anda, camina,
anda, vamos, anda.

No hay comentarios:

Publicar un comentario